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Llega la temporada de lluvia y con ella llegan las luciérnagas. Aquí te dejamos un directorio de dónde puedes verlas.

Pero espera espera, vamos tranqui precioso, ya sabes cómo me encanta darte información e historia sobre los lugares o bien los sucesos que pasen en estos, ya que así podrás tener un poco de contexto de lo que estás viendo y viviendo, por lo tanto comencemos, ¿Qué son las luciérnagas?.

“Las luciérnagas son insectos que emiten luz, pertenecen a la familia de los escarabajos y habitan en bosques tropicales y templados; en nuestro país existen más de 80 especies endémicas de luciérnagas. Estos insectos viven como larvas hasta dos años, suelen resguardarse entre la corteza de los árboles o en madrigueras subterráneas; se alimentan de lombrices, caracoles y otros bichitos relacionados con la descomposición de la madera” nos informa el gobierno de la Ciudad de México.

Durante los meses de mayor lluvia (entre junio y agosto) alrededor de las ocho de la noche, una vez que el sol se ha ocultado, aparecen estos seres de luz en la oscuridad. Tanto hembras como machos vuelan conformando verdaderas nubes de pequeñas luces que parpadean y avanzan como ráfagas de luz entre las sombras y la vegetación del bosque; son delicadas danzas de comunicación entre insectos que comparten su luz para reproducirse y subsistir como especie. Está exhibición se puede ver en los estados de Tlaxcala, Puebla y Estado de México (Edomex).

Ya se edomexas que hermosos seres vivos, el espectáculo que hacen es único, aunque no solamente tienen esa increíble luz que los caracteriza, sino que también juegan un papel importante en el ecosistema, ya que son benéficas para el ambiente, pues en estado larvario depredan insectos menores; y una vez adultas, contribuyen a la polinización de plantas, flores y alimentos.

Lo que necesitas saber

Para conservar estos hermosos ejemplares es importante tener varios cuidados, aquí te dejo una guía para preservar las luciérnagas:

Respetar la vegetación donde habitan, no tales, ni podes esas zonas.

Evita utilizar insecticidas, pues además de eliminar los insectos que no deseas, también perjudicas a las luciérnagas y otros insectos benéficos para el ecosistema.

Lleva tus residuos contigo luego de visitar bosques o áreas naturales, para no producir la contaminación de estos sitios.

Evita la contaminación lumínica, ya que la luz compite con la luminosidad de sus destellos, alterando así el ciclo reproductivo tanto de luciérnagas como de otros animales y plantas, (si vas a visitarlas, trata de no poner ningún tipo de luz, las vas a perjudicar).

Como datos curiosos, porque como me encanta darte información adicional de los temas:

Su brillo proviene de una reacción química entre el oxígeno y una sustancia llamada luciferina, que se encuentra en sus cuerpos. Esta reacción se llama bioluminiscencia y produce luz sin apenas generar calor.
Están desapareciendo por la contaminación lumínica de las ciudades y pueblos, pero sobre todo de las ciudades, hace que las luciérnagas se despisten y tengan más dificultad para reproducirse.
Las luciérnagas hembras de algunas especies sacuden sus traseros y hacen brillar su luz para atraer a los machos y luego comérselos.
Son conocidos con varios nombres. En algunas regiones son conocidos como cucuyos o bichos de luz.
En lugar de producir destellos brillantes, emiten una luz tenue y constante que imita la luz de la luna. Esto las ayuda a pasar desapercibidas para los depredadores que buscan patrones de destellos intermitentes.

Ya mucho texto y contexto, si quieres admirar este show de la naturaleza con tus propios ojos, te daré un directorio local para que cheques los lugares y costos, pero… antes de ir tienes que saber esto: para ver a las luciérnagas, se recomienda llevar ropa oscura, abrigada e impermeable, sin reflejos ni olores fluorescentes, una muda extra por si llega a llover, al igual que un calzado antiderrapante o botas para la lluvia (por precaución) y por último, no se permite el uso de linternas, cámaras con flash o cualquier aparato que que emita luz, música o ruido durante el avistamiento.